Bosque

Patrullo por el bosque después de tanto tiempo fuera de esta academia, no tenía pensado volver.
No me importaba mucho, pero ella? Ya no es ella y yo no volveré a dirigirle la palabra, la trataré como ha cualquier otro vampiro de este maldito mundo.
Camino entre los árboles mirando de un lado para otro.

Percibo el aroma de Yuuki al mismo tiempo que oigo sus pasos. Ésta se para pero yo no me doy la vuelta solamente mi mano se convierte en un puño mientras yo sigo andando.

Me paro un momento, pienso en la situación. La verdad es que aunque no pueda ni ver a Yuuki no me quita de mis responsabilidades. A lo mejor ella está aqui para decirme algo.
Me giro y camino en su dirección sin decir nada.

Caminaba perdida en mis pensamientos, mirando los árboles y el cielo que se adivinaba entre sus ramas. Hacía una brisa algo fría, pero no me importaba. Llevaba puesta la chaqueta del uniforme, así que no la sentía. La clase se me había hecho larga; no había podido hablar con nadie y las maerias me habían resultado muy aburridas. Resoplé. Sobre todo matemáticas.
Ahora me encontraba más a gusto. Siempre había tenido un lado algo solitario y en aquel momento, sola en el bosque, podía disfrutar de él. Me senté a la sombra de un árbol y respiré hondo. Después de todo, me estaba empezando a gustar la academia Cross. Allí, fuera de la ciudad, sin aquellos ruidos, se estaba genial.
Pero, entonces, escuché unas voces. Me quedé quieta donde estaba, algo erguida, escuchando con atención. Si eran humanos, no tenía ningún problema, pero si eran vampiros, era otra cosa. Miré asomándome un poco desde detrás del trondo donde estaba apoyada. Suspiré. Eran los prefectos. No sabía si aquello era bueno o malo. Por un lado, no resultaban un peligro, pero por otro, no sabía si estaba infringiendo alguna norma. Así que decidí sbir a aquel árbol y permanecer allí escondida. No se me apetecía tener que interrumpir mi paseo. Miré la escena desde la rama donde me senté, con curiosidad, pero sintiéndome algo culpable por estar escuchando una conversación ajena.
Entonce sentí la rama crujir. Con horror, vi como se estaba partiendo bajo mi peso. No me dio tiempo a reaccionar; caí al suelo con un sonoro golpe. Me quedé sentada en el suelo con un paralizada por la sorpresa y el dolor. Y lo peor era que ahora estaba a la vista de los prefectos. Tragué saliva.

Me acerco a Yuuki sin ninguna expresión en mi cara.
-Bueno, ¿pasa algo?-digo mientras escucho a alguien llegar, era una humana. De pronto ésta cae de un árbol mientras miro la situación sin interés.

Me quedé paralizada sin saber que hacer. Entre el dolor y el desconcierto por la caída y que uno de los prefectos me había descubierto no me salían las palabras.
-Eermmm... -comencé a decir.- Esto... estaba dando un paseo y...
Estaba cortada porque me había pillado escuchando una conversación ajena, aunque no hubiera sido a posta.

Miro al suelo algo incomoda por la situación, echando de menos la confianza que tenía con Zero hasta que ocurrió aquello, suspiro.
Al escuchar su pregunta abro la boca para decirle que el director quería verle, pero entonces escucho una rama romperse y algo , mas bien alguien, caer al suelo. Doy un respingo y me giro para ver quien era, es una chica de la clase diurna, no me sonaba haberla visto nunca, me acerco hasta donde está y le tiendo la mano para ayudarla a levantarse.
-¿Estás bien?



off: Se suponia que iba a postear hace unas horas pero no pude >.< lo sieento

Acepté con una tímida sonrisa la mano que me tendía la prefecta. Me levanté rápidamente del suelo.
-Sí, solo ha sido un golpecito -dije sonriente, pero era mentira; dolía bastante, pero no quería preocupar a nadie. Pensé que sería mejor contarle que hacía allí.
-Perdón por escuchar vuestra conversación, pero soy nueva por aquí y no conozco muy bien las normas, así que no sabía si podía salir por el bosque tan tarde... Por cierto, soy Hakuro.

Off: No importa xD a mi también me suele pasar eso >.<

Sonrio mientras la ayudo a levantarse y ladeo levemente la cabeza al escucharla.
-Tranquila no pasa nada por eso -sonrio de nuevo, realmente no habia nada que escuchar- Aunque en cuanto a las normas... Salir después del toque de queda es peligroso, así que tenlo en cuenta la proxima vez -advierto- Yo soy Yuuki, yo como puedes ver -digo señalando la bandana- soy la prefecta, asi que cualquier problema que tengas dimelo y te ayudaré en lo que sea posible.



Off: Zero me dijo que iba a estar fuera unos dias, asi que creo que tardará en postear ._. si quieres seguimos roleando nosotras o podemos esperarle

-Encantada Yuuki -le dije, sonriendo.- Ah, vale, no sabía que fuera peligroso salir después del toque de queda -me incliné en señal de disculpas.- Perdón por las molestias.

Off: Ok, como tu quieras! ^^

Sailó de su ensimismamiento y sigui caminando tranquilamente, sin embargo pronto escuchó unas voces a lo lejos. No quería que nadie la viera por ahí, así que se escondió detrás de un árbol
Pronto pudo ver a su primo, Zero que estaba de espaldas, con un sobresalto

Decidí explorar el bosque de aquella academia. Era lo que más me llamaba la atención, aparte de la rotación de las clases nocturna y diurna. Me había despertado bastante pronto, casi no se había ocultado el sol todavía.
Me encontré con varias personas conversando. Una humana escondida, y dos vampiros conversando con otra humana. Me llevé una sorpresa al descubrir entre ellos a la Princesa Sangre Pura Kuran. El otro también me sonaba: Zero Kiryuu, un cazavampiros. La otra chica también me resultaba familiar, pero no llegaba a caer de qué. ¿Por qué no comprobarlo?
Me acerqué a ellos pasando lo suficientemente cerca de la chica que estaba escondida como para que mi largo pelo rozase con ella. Era mi forma de decirle que sabía que estaba ahí. Le dirigí una rápida mirada y me volví hacia los otros tres.
-¡¡Holaa!! Va a hacer una noche estupenda ¿verdad? -comenté sonriente.

-¡Oh, es fantástica! -le respondí.- Es enorme, me ha encantado. Pero... las clases me han aburrido un poco, sobre todo la de mates -bromeé.
Entonces llegó una chica comentando de que iba a hacer una noche estupenda. La miré un poco sin saber que decir.

Miré divertida a la humana, que se había quedado sin palabras. Le dirigí una sonrisa encantadora, pero helada. Miré a los prefectos, esperando a que dijesen algo. Como nadie hablaba, solté:
-¿Se os comió la lengua el gato? -bromeé. Repentinamente, puse cara de inocencia, y una voz de arrepentimiento- Ooh, perdón, siento haber importunado...

Me desempano y miro a Hakuro sonriendo.
-Si, las clases son un tanto aburridas... Siempre acabo durmiendome -comento mientras rio.
Notaba una presencia cerca, aunque no sabía de donde provenia, aunque algo me saca de esa búsqueda, en ese momento llega alguien mas, una chica de la clase nocturna, debe de ser nueva porque nunca la había visto por aquí. Fraiah viene y de repente se va, frunzo el ceño, hace mucho que no se de ella, ya la veré otro día. Dirijo la mirada hacia la chica.
-Buenas noches -saludo- ¿Importunado? ¿Por qué?


Off: Siento la tardanza :_: como ya puse he estado ausente >.<

Salgo de mi empane
Veo que había empezado a llegar demasiada gente, miro a Yuuki y luego a los demás. Me alejo del grupo para mirar hacia otro lado.

off: siento la tardanza ._.

-Nada nada -respondí.- Pero me dio la sensación de haber interrumpido vuestra conversación.
Dicho ésto me di la vuelta.
-¡Buenas noches prefectos y alumna! -dije sonriente antes de irme.
Me interné en el bosque, bajo la luz de la luna. Tal vez, curioseara por algún sitio más. Pero, por ahora, era hora de disfrutar de la noche.

Bueno me parece que aquí ya no pinto absolutamente nada y como Yuuki no ha dicho nada, creo que debería de ir a ver al director.
Salgo de allí.

-Bu... buenas noches- respondí. La súbita aparición y despedida de aquella chica me dejaron sin palabras. No se me escapó la extraña mirada que me dedicó. Además, me daba la espina de que era un vampiro. Decidí vigilarla.
-Bueno..eerm... yo también me voy yendo ¡Buenas noches! -le dije a la prefecta, ya que su compañero se había ido. Caminé deprisa hasta internarme en el bosque. Una vez allí, me escondí entre las sombras, intentando localizar el rastro de la chica.
Al rato, la encontré. Me escondí tras el tronco de un árbol y la observé.

Sentí la presencia de la joven observándome. Cerré los ojos, sonriendo. Pobre humana... tan ignorante como sus congéneres... a pesar de quien era. Abrí los ojos y paré de caminar.
-Kimara... susurré.