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Sala de Estar
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Sala de Estar
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- Katrina Darent
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Re: Sala de Estar
Había escuchado esas palabras. Él no estaba loco y su oído funcionaba demasiado bien. No dudó ni un segundo cuando apartó a Adam de un fuerte empujón de la puerta y la abrió de una patada. Se quedó de pie ante ellas, respirando agitadamente.
- ¡¿Qué has dicho?! -gritó, con los ojos abiertos como platos. Sus pupilas contraídas denotaban sus deseos de que aquello no fuera verdad.
- ¡¿Qué has dicho?! -gritó, con los ojos abiertos como platos. Sus pupilas contraídas denotaban sus deseos de que aquello no fuera verdad.
- Christian Blade
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Re: Sala de Estar
Ante tal empujón, Adam estuvo a punto de arrancarle la cabeza de una trompada a su hermano.
- ¿Pero qué demonios crees que haces? -le gritó mientras lo sujetaba del cuello de la camisa, pero este ya había ingresado y, al parecer, lo que ambos habían oído era cierto. La única diferencia, era que a Adam parecía no afectarle tanto. Sólo soltó lentamente la camisa de su hermano y miró a Katrina; luego a Fraiah, y luego otra vez a Katrina.
- ¿Pero qué demonios crees que haces? -le gritó mientras lo sujetaba del cuello de la camisa, pero este ya había ingresado y, al parecer, lo que ambos habían oído era cierto. La única diferencia, era que a Adam parecía no afectarle tanto. Sólo soltó lentamente la camisa de su hermano y miró a Katrina; luego a Fraiah, y luego otra vez a Katrina.
- Adam Blade
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Re: Sala de Estar
Dejó caer el pañuelo al suelo, el cual se fue meciendo con el viento. Cerró los ojos ante el estruendo de la puerta al abrirse, el griterío, la frustración, el no saber qué hacer. Sus ojos se estaban cristalizando, pero no iba a derramar ni una sola lágrima. No por ahora, al menos. Sólo atinó a quedarse de pie, quieta, entre los brazos de Katrina. Sentía sus temblorosas convulsiones a causa del llanto. Qué irónico resultaba que no fuera ella la que lloraba, ¿cierto?
- Al parecer, siempre han sido otros los que han tenido el control sobre mi vida -susurró. Sus palabras sonaban amargas como la hiel, pero una melancólica sonrisa de situaba en sus labios. ¿Ella se encontraba en verdad tan perdida?
- A veces quisiera saber cuál es mi destino en este mundo.
Musitó aquellas palabras tras oír las de Katrina. ¿Salvarla? Ella ya no tenía salvación alguna. Al parecer, el universo conspiraba para hundirla cada vez más. ¿En verdad se lo merecía tanto?
- Al parecer, siempre han sido otros los que han tenido el control sobre mi vida -susurró. Sus palabras sonaban amargas como la hiel, pero una melancólica sonrisa de situaba en sus labios. ¿Ella se encontraba en verdad tan perdida?
- A veces quisiera saber cuál es mi destino en este mundo.
Musitó aquellas palabras tras oír las de Katrina. ¿Salvarla? Ella ya no tenía salvación alguna. Al parecer, el universo conspiraba para hundirla cada vez más. ¿En verdad se lo merecía tanto?
- Fraiah B. Eslin
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Re: Sala de Estar
De pronto vio entrar a los muchachos, el uno haciendo trizas la puerta y el otro con cara de querer asesinar al primero. Katrina se separo de Fraiah y miro a Christian. ¡He dicho que tu hermana se muere por la incompetencia de cierto cazavampiros! Exclamo frustrada. Miro a Adam, ahora si que lo iba a necesitar mas que nunca, como ella bien recordaba, si Adam o Fraiah morían... Ella perecería también. Lanzo este pensamiento a la mente de Adam con cara de preocupación, debían salvarla, costara lo que costara.
- Katrina Darent
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Re: Sala de Estar
Se quedó observando fijamente a Fraiah. Las palabras de Katrina le atravesaron el alma -si es que tenía una- y le arrancaron el raciocinio. ¿Cómo podía ser posible...?
- Explícate -sugirió casi como una orden. No podía entender lo que pasaba. Pero, lo único que sabía, era que si esto era culpa de Nokku como ella decía, debería hablar seriamente con el cazador. Él estaba dispuesto a ayudarlo a protegerla, como le había pedido, pero jamás estaría dispuesto a ayudarle a matarla. No quería ni pensar que Damaru haya hecho esto a propósito para eliminar a su hermana completamente de la faz de la tierra. Pero esa idea le molestaba demasiado en medio de su mente.
Observó a Fraiah y comenzó a acercarse a ella. La sujetó por los hombros, mirando su cabello y luego la giró suavemente. Se arrodilló ante ella.
- Hey, no digas esas cosas. Nadie va a manejar tu vida nunca más, ¿de acuerdo? Estarás bien -susurró dulcemente. Haría algo al respecto, aunque eso significase colaborar con Katrina.
- Explícate -sugirió casi como una orden. No podía entender lo que pasaba. Pero, lo único que sabía, era que si esto era culpa de Nokku como ella decía, debería hablar seriamente con el cazador. Él estaba dispuesto a ayudarlo a protegerla, como le había pedido, pero jamás estaría dispuesto a ayudarle a matarla. No quería ni pensar que Damaru haya hecho esto a propósito para eliminar a su hermana completamente de la faz de la tierra. Pero esa idea le molestaba demasiado en medio de su mente.
Observó a Fraiah y comenzó a acercarse a ella. La sujetó por los hombros, mirando su cabello y luego la giró suavemente. Se arrodilló ante ella.
- Hey, no digas esas cosas. Nadie va a manejar tu vida nunca más, ¿de acuerdo? Estarás bien -susurró dulcemente. Haría algo al respecto, aunque eso significase colaborar con Katrina.
- Christian Blade
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Re: Sala de Estar
Cerró los ojos ante el grito de Katrina. No quería oír aquello. No, de ninguna manera. No quería volver a oírlo. Nokku, él... ¿él no sabía que esto podría haber ocurrido? Pero no podía echarle la culpa simplemente. Este era el resultado de una promesa que a él le llevó mucho tiempo poder cumplir. Quizás lo mejor hubiera sido borrarla, pero borrarla hubiera significado olvidar todo lo que a ambos les unía.
Christian se acercó y brindó su contención y protección. Fraiah lo miró. Iba a agradecerle, pero no necesitaba hacerlo. No necesitaba ni quería hacerlo. Solamente, quería estar sola. Ahora más que nunca. ¿Cómo iba a salvarse ahora? Necesitaba la sangre del Pura Sangre que la convirtió, y este estaba muerto. Aunque Katrina hubiese absorbido sus poderes y su ser vampírico, por más que ella le ofreciese su propia sangre, eso sólo la sacaría de apuros momentáneamente. ¿Qué haría? ¿Retrasaría la muerte? No sabía si quería eso o prefería morir y ya.
Apartó a Christian suavemente y caminó hacia la puerta. Pasó a un lado de Adam y ni lo miró. Atravesó el umbral y comenzó a caminar. No quería que la siguieran. Ella se las arreglaría sola. No necesitaba que la protejan. Sólo quería estar sola. ¿Eso era mucho pedir?
Christian se acercó y brindó su contención y protección. Fraiah lo miró. Iba a agradecerle, pero no necesitaba hacerlo. No necesitaba ni quería hacerlo. Solamente, quería estar sola. Ahora más que nunca. ¿Cómo iba a salvarse ahora? Necesitaba la sangre del Pura Sangre que la convirtió, y este estaba muerto. Aunque Katrina hubiese absorbido sus poderes y su ser vampírico, por más que ella le ofreciese su propia sangre, eso sólo la sacaría de apuros momentáneamente. ¿Qué haría? ¿Retrasaría la muerte? No sabía si quería eso o prefería morir y ya.
Apartó a Christian suavemente y caminó hacia la puerta. Pasó a un lado de Adam y ni lo miró. Atravesó el umbral y comenzó a caminar. No quería que la siguieran. Ella se las arreglaría sola. No necesitaba que la protejan. Sólo quería estar sola. ¿Eso era mucho pedir?
- Fraiah B. Eslin
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Re: Sala de Estar
Adam, inmutable ante aquel escenario, hubiera querido acercarse a Katrina y abrazarla suavemente. Pero, en su lugar, se quedó de pie observando lo miserables que parecían. Christian intentando dar esperanzas que ni él se creía, y Katrina llorando como si su vida dependiera de ello.
Y entonces la información directo a su mente se dirigió. Abrió los ojos de par en par, observándola fijamente. ¿Cómo que si algo le sucedía tanto a él como a Fraiah ella moriría? ¿Cómo podía haber sido tan estúpida de crear un vínculo de ese tipo? Se ahorró todo tipo de comentario. Delante de Christian no haría ni diría nada.
Fraiah se alejó hasta traspasar la puerta. Él no intentó detenerla. Estaba mirando fijamente a Katrina, y sólo ella acaparaba su atención. Ahora sí estaba preocupado.
Y entonces la información directo a su mente se dirigió. Abrió los ojos de par en par, observándola fijamente. ¿Cómo que si algo le sucedía tanto a él como a Fraiah ella moriría? ¿Cómo podía haber sido tan estúpida de crear un vínculo de ese tipo? Se ahorró todo tipo de comentario. Delante de Christian no haría ni diría nada.
Fraiah se alejó hasta traspasar la puerta. Él no intentó detenerla. Estaba mirando fijamente a Katrina, y sólo ella acaparaba su atención. Ahora sí estaba preocupado.
- Adam Blade
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Re: Sala de Estar
Observo a Fraiah marcharse y miro a Christian. Mira, estoy cansada de esta maldita guerra nuestra, al igual que tu me preocupo por ella, y me da lo mismo si lo entiendes o si no. Comenzó a decir mientras recogía la copa del suelo. No voy a dejarla morir, de ninguna manera. Musito para si misma. No se que es exactamente lo que la pasa, pero he visto casos similares y créeme, necesitamos parar el proceso cuanto antes. ¿Quieras salvar a tu hermana? Entonces harás lo que yo te diga. Dijo mirándolo fijamente, no iba a aguantar ninguna estupidez mas, ni una niñeria ni nada por el estilo. Se llevo una mano a la frente. Christian, síguela sin que te vea ni te note y controla que no se mete en problemas, es lo ultimo que necesitamos ahora. Dijo tajante, no iba a aceptar un no por respuesta, sabia que Fraiah quería estar sola pero no podía correr ese riesgo.
- Katrina Darent
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Re: Sala de Estar
Ella se fue. Ella lo esquivó y simplemente se alejó. Christian la observó. Realmente si pudiera intercambiaría lugares con ella, sin duda.
Escuchó las palabras de Katrina y la miró fijamente. No dijo ni una palabra al respecto. Era obvio que quería parar el proceso. ¿Pero cómo?
Simplemente, se giró y caminó hasta la puerta, saliendo de allí. No era necesario hablar para darle a entender que estaba de acuerdo. Parece que la tregua no sería sólo con Adam.
Escuchó las palabras de Katrina y la miró fijamente. No dijo ni una palabra al respecto. Era obvio que quería parar el proceso. ¿Pero cómo?
Simplemente, se giró y caminó hasta la puerta, saliendo de allí. No era necesario hablar para darle a entender que estaba de acuerdo. Parece que la tregua no sería sólo con Adam.
- Christian Blade
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Re: Sala de Estar
Tsk...gusanos... ¿Tenías que decirselo katrina? Pensé que serías más inteligente
Dije mientras aparecía poco a poco en medio de la sala, creando una corriente de viento algo molesta.
Miré hacia los lados, sin girar la cabeza, con un semblante serio y algo cansado. No me apetecía mantener una discusión con la vampiresilla, sabía perfectamente lo que me iba a decir y simplemente me gustaría ahorrar esas inutiles palabras. Claro, entre el presidente y el cazador más listo de la historia, Tetsuya, habrían cometido el mismo error que habían usado algunos estúpidos en sus antídotos anticuados. Pues no. Suspiré. Los genes de Frah solo estaban algo revueltos, preocupándola empeoraban más el proceso, pero claro, Christian tuvo que traerlos para que Fraiah hablara con Katrina.
Tranquilo Christian. Fraiah estará bien
Dije mirando al techo de la habitación despreocupado. Ahora tendría que modificar un poco los planes, no podía dejar que Fraiah se pusiera muy nerviosa.
¿Alguno sabe donde esta ese estúpido de Rido?... voy a necesitar sangre suya...
Miré al suelo, como buscando algo, olía un poco a sangre. Vi una copa de sangre derramada y una manzana. Que interesante.
La próxima vez prueba a degollar a un humano delante de ella, seguro que eso hará que se ponga bien
Dije mirando sarcásticamente a Katrina. Me chasqueé algunos huesos de las manos y luego suspiré de nuevo ¿Porque no se metían en sus asuntos esos vampiros metomentodos? ¿Y que hacía Adam ahí? Si mal no recordaba le importaba bien poco la seguridad de Fraiah... en fin. No importa, eso no cambiará nada. Hmmmm ¿Cuanta proporción de sangre de ese chupasangre, Rido, necesitaría para que no se descontrolase Fraiah? Echaba de menos a Tetsu, se le daba mucho mejor eso de calcular, pero podría arreglárselas solo, al fin y al cabo Fraiah dependía de ello.
Dije mientras aparecía poco a poco en medio de la sala, creando una corriente de viento algo molesta.
Miré hacia los lados, sin girar la cabeza, con un semblante serio y algo cansado. No me apetecía mantener una discusión con la vampiresilla, sabía perfectamente lo que me iba a decir y simplemente me gustaría ahorrar esas inutiles palabras. Claro, entre el presidente y el cazador más listo de la historia, Tetsuya, habrían cometido el mismo error que habían usado algunos estúpidos en sus antídotos anticuados. Pues no. Suspiré. Los genes de Frah solo estaban algo revueltos, preocupándola empeoraban más el proceso, pero claro, Christian tuvo que traerlos para que Fraiah hablara con Katrina.
Tranquilo Christian. Fraiah estará bien
Dije mirando al techo de la habitación despreocupado. Ahora tendría que modificar un poco los planes, no podía dejar que Fraiah se pusiera muy nerviosa.
¿Alguno sabe donde esta ese estúpido de Rido?... voy a necesitar sangre suya...
Miré al suelo, como buscando algo, olía un poco a sangre. Vi una copa de sangre derramada y una manzana. Que interesante.
La próxima vez prueba a degollar a un humano delante de ella, seguro que eso hará que se ponga bien
Dije mirando sarcásticamente a Katrina. Me chasqueé algunos huesos de las manos y luego suspiré de nuevo ¿Porque no se metían en sus asuntos esos vampiros metomentodos? ¿Y que hacía Adam ahí? Si mal no recordaba le importaba bien poco la seguridad de Fraiah... en fin. No importa, eso no cambiará nada. Hmmmm ¿Cuanta proporción de sangre de ese chupasangre, Rido, necesitaría para que no se descontrolase Fraiah? Echaba de menos a Tetsu, se le daba mucho mejor eso de calcular, pero podría arreglárselas solo, al fin y al cabo Fraiah dependía de ello.
- Nokku Damaru
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Re: Sala de Estar
Observo la marcha de Chritian y se abrazo a si misma, ¿Que iba a ser de Fraiah ahora? Miro a Adam que por fin parecía comprender la situación. Abrió la boca para decir algo pero alguien al interrumpió.
Ella lo miro sin decir una palabra, no iba a entrar en su juego. No estaba de humos para sus gilipolleces. Suspiro y miro a Nokku. Lárgate, ¿quieres? Musito dándole la espalda y mirando por la ventana.
Ella lo miro sin decir una palabra, no iba a entrar en su juego. No estaba de humos para sus gilipolleces. Suspiro y miro a Nokku. Lárgate, ¿quieres? Musito dándole la espalda y mirando por la ventana.
- Katrina Darent
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Re: Sala de Estar
Adam observó la escena aún en silencio. Tras Fraiah, se marchó Christian. Alzó la vista y observó a Katrina. Parecía realmente dolida por todo aquello, y pues para no estarlo si sabes que tu existencia depende de ellos.
- Nunca deberías haber hecho eso -musitó, pero en cuanto iba a continuar hablando, apareció él. Adam lo miró fijamente. ¿Acaso creía siempre tener la última palabra en todo?
- Mira, Damaru, querías que aquella mocosa fuera humana, ahí está, ahí lo tienes. ¿Pero qué vas a hacer si se descontrola? ¿Cómo puedes concebir una humana que necesite sangre para vivir? Eso es enfermo, incluso para mí, que sabes que no soy muy amante de la cordura -prosiguió, dando un paso adelante y situándose cerca del cazador. Habló en un tono de voz pacífico y hasta educado-. ¿Qué harás si ella... mata? -una pequeña sonrisa afloró-. ¿La cazarás como a uno más? Esto será tu responsabilidad, y será mejor que comiences a hacerte cargo de todas las consecuencias.
Tras concluir sus palabras, miró a Katrina y suspiró. Esta situación era una blasfemia contra su estirpe.
- Ahora será mejor que te marches -dijo dirigiéndose a Nokku.
- Nunca deberías haber hecho eso -musitó, pero en cuanto iba a continuar hablando, apareció él. Adam lo miró fijamente. ¿Acaso creía siempre tener la última palabra en todo?
- Mira, Damaru, querías que aquella mocosa fuera humana, ahí está, ahí lo tienes. ¿Pero qué vas a hacer si se descontrola? ¿Cómo puedes concebir una humana que necesite sangre para vivir? Eso es enfermo, incluso para mí, que sabes que no soy muy amante de la cordura -prosiguió, dando un paso adelante y situándose cerca del cazador. Habló en un tono de voz pacífico y hasta educado-. ¿Qué harás si ella... mata? -una pequeña sonrisa afloró-. ¿La cazarás como a uno más? Esto será tu responsabilidad, y será mejor que comiences a hacerte cargo de todas las consecuencias.
Tras concluir sus palabras, miró a Katrina y suspiró. Esta situación era una blasfemia contra su estirpe.
- Ahora será mejor que te marches -dijo dirigiéndose a Nokku.
- Adam Blade
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Re: Sala de Estar
Los miré a los dos. Eran demasiado sentimentales teniendo en cuenta su naturaleza. Por lo menos no tuve que discutir sobre nada. Escuché las palabras de Adam sin mirarlo y cuando finalizó posé lentamente mi mirada sobre el ¿Porque no le mataba ahí mismo? No, ya había demasiados problemas, y además Fraiah se pondría aun más nerviosa. Vampiros, estaban por todas partes, esa enfermedad que hacía volver a la vida a lo que debería estar muerto, era como un virus que se extendía a lo largo del planeta. Fraiah... ella no merecía estarlo, no merecía ser mancillada con el virus de los nocturnos. No, ella debía ser una muchacha sana y feliz. Estaba claro, no existía ningún Dios si permitía que tales cosas como estas ocurrieran. Su enfermedad.... tenía que correr el riesgo, todo esta minuciosamente calculado, pero aún asi el corazón de Fraiah caminaba sobre una cuerda floja. Esto acababa de empezar. Yo cumplí con mi promesa, la ofrecí la posibilidad de no solo ser humana, si no además conseguir el poder de proteger a los demás, pero para ello tendría que cruzar un delicado camino lleno de trampas mortales. Yo la había empujado hacia ese camino hacia la libertad, a ese campo minado con una bohémica luz al final. Pero no lo había echo sin más, dentro de ella, ya se había sembrado la semilla del mal, la semilla que acabaría con ella desde dentro, no podía permitirlo, era dejar que se muriera sin poder ver la luz o arriesgarme a empujarla para que la alcanzara o muriera intentándolo. Personalmente, yo preferiría eso miles de veces antes que sucumbir a una muerte lenta y dolorosa a manos de mi propia mente, que me machacaría cada vez que mi garganta sintiera el deseo de la sangre. ¿Y que les podía explicar a esos pobres seres que no comprendían mi forma de ser? Que solo miraban por si mismos y de vez en cuando por las personas que aman. Yo tenía que mirar por todos, y no me arrepentía de ello. Es solo que a veces... me sentía como una bestia solitaria que tenía que vigilar a unos animales en el bosque para que no se mataran entre ellos. Ese fue el camino que elegí cuando los vampiros acabaron con mi familia, con mis amigos, con todo lo que quería y amaba.
Fraiah tendría que enfrentarse a si misma, si era cierto que había madurado finalmente su cuerpo asimilará sus nuevos genes... si no, sencillamente moriría.
Si... tienes razón, es mejor que me vaya, no hay nada que hacer aquí con vosotros
Dije mirando melancólicamente por la ventana. Respondí por acto reflejo, ni siquiera estaba escuchando mis propias palabras, absorto en mis profundos pensamientos. Había muchas cosas que hacer.
No molestéis más a Fraiah con vuestras cosas, no me importa que tipos de asuntos sean, sencillamente cualquier vampiro que se acerque a esa humana será enemigo incondicional de la Asociación.
Suspiré, no era broma, si Katrina, Adam o cualquiera de esos indeseables chupasangres se acercaba a ella no dudaría en intentar matarlo. Levanté la vista después de unos largos segundos y me fui sin prisa del lugar.
Fraiah tendría que enfrentarse a si misma, si era cierto que había madurado finalmente su cuerpo asimilará sus nuevos genes... si no, sencillamente moriría.
Si... tienes razón, es mejor que me vaya, no hay nada que hacer aquí con vosotros
Dije mirando melancólicamente por la ventana. Respondí por acto reflejo, ni siquiera estaba escuchando mis propias palabras, absorto en mis profundos pensamientos. Había muchas cosas que hacer.
No molestéis más a Fraiah con vuestras cosas, no me importa que tipos de asuntos sean, sencillamente cualquier vampiro que se acerque a esa humana será enemigo incondicional de la Asociación.
Suspiré, no era broma, si Katrina, Adam o cualquiera de esos indeseables chupasangres se acercaba a ella no dudaría en intentar matarlo. Levanté la vista después de unos largos segundos y me fui sin prisa del lugar.
- Nokku Damaru
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Re: Sala de Estar
Ni siquiera miro a Nokku, no tenia ganas de verlo, simplemente nos e encontraba con fuerzas suficientes, en estos momentos desearía haberlo matado cuando tuvo la oportunidad, aunque pensándolo bien, el ni siquiera sabe lo que hace. Haré lo que deba. Musito un instante antes de que se marchara. Pobre muchacho, le habían obligado a dirigir una Asociación demasiado joven, el pensaba que podría salvarlos a todos, ¿Cuando se daría cuenta de que no es así? Cuando se marcho se acerco a Adam y lo abrazo enterrando su rostro en su pecho, habían sido demasiadas cosas en un solo día.
- Katrina Darent
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Re: Sala de Estar
Miró a Damaru fijamente hasta que se retiró. Tsk, ese crío. Ojalá Fraiah se muriera de una buena vez y él sienta lo que verdaderamente es la desesperación. Pero, al instante de pensar aquello, miró a Katrina. No, la joven no podía morir, pues si lo hacía, se llevaría a Katt con ella. Eso era algo que Adam no podía permitir. Apretó los dientes, sintiendo la furia recorriéndole el cuerpo. Katt se acercó a él y se recostó sobre su pecho, ocultando su rostro. Adam la abrazó, envolviéndola entre sus brazos.
- Eres una tonta -murmuró-. Para ser Líder del Consejo, tienes demasiado corazón. Aún me parece extraño recordar cuando te conocí, en aquella fiesta, ¿lo recuerdas? Eras una maldita cría crea problemas -sonrió.
- Eres una tonta -murmuró-. Para ser Líder del Consejo, tienes demasiado corazón. Aún me parece extraño recordar cuando te conocí, en aquella fiesta, ¿lo recuerdas? Eras una maldita cría crea problemas -sonrió.
- Adam Blade
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Re: Sala de Estar
Escucho las palabras que Adam pronuncio. Corazón.. Si, podría llamarse así.. Aunque todo me sale mal. Escucho su siguiente comentario y sonrió claro que lo recordaba, el estaba con Anabela... Sonrió al recordar la cara de esta cuando el le beso la mano, era hasta divertido. ¿Donde se habría metido esa muchacha? Hacia siglos que no se la veía por la academia.
Fue una época un tanto extraña si. Musita mirándole a los ojos con una sonrisa. Manda mentalmente las imágenes que tenia de el junto con Anabela a su mente y ríe levemente recordándolo, ella no era celosa ni mucho menos, sabia que habría mujeres en el pasado de Adam al igual que había hombres en el suyo, mientras la "señorita" no volviera a molestarles todo iría bien.
Fue una época un tanto extraña si. Musita mirándole a los ojos con una sonrisa. Manda mentalmente las imágenes que tenia de el junto con Anabela a su mente y ríe levemente recordándolo, ella no era celosa ni mucho menos, sabia que habría mujeres en el pasado de Adam al igual que había hombres en el suyo, mientras la "señorita" no volviera a molestarles todo iría bien.
- Katrina Darent
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Re: Sala de Estar
Ladeó el rostro al escuchar sus primeras palabras. Acercó una mano a su mejilla y propinó en ella una suave caricia. Acto seguido, levantó su mentón.
- No es cierto. No es que todo te sale mal a ti, simplemente el universo no conspira para mejorar las cosas. Y creo que jamás debiste haber creado ese vínculo, ni con Fraiah ni conmigo. ¿En qué demonios estabas pensando, Katt?
Y tras soltar aquel comentario con aquel interrogante al final, suspiró. Pero ella comenzó a recordarle los tiempos "prestigiosos" con la joven Anabela. Vaya, sí que se había divertido. No era una mala muchacha, simplemente parecía estar dispuesta a acatar todo lo que él le dijese. Qué sencillo de manejar parecía todo en aquellos tiempos. Sonrió suavemente y negó con la cabeza.
- Eres cruel como toda mujer con esas cosas -susurró-. Pobre Anabela -acotó luego, pero se percató de algo: no iba a cambiar de tema tan rápidamente. La observó fijamente y su semblante volvió a estar serio, aunque siempre sereno.
- Aún no me has respondido una pregunta -murmuró.
- No es cierto. No es que todo te sale mal a ti, simplemente el universo no conspira para mejorar las cosas. Y creo que jamás debiste haber creado ese vínculo, ni con Fraiah ni conmigo. ¿En qué demonios estabas pensando, Katt?
Y tras soltar aquel comentario con aquel interrogante al final, suspiró. Pero ella comenzó a recordarle los tiempos "prestigiosos" con la joven Anabela. Vaya, sí que se había divertido. No era una mala muchacha, simplemente parecía estar dispuesta a acatar todo lo que él le dijese. Qué sencillo de manejar parecía todo en aquellos tiempos. Sonrió suavemente y negó con la cabeza.
- Eres cruel como toda mujer con esas cosas -susurró-. Pobre Anabela -acotó luego, pero se percató de algo: no iba a cambiar de tema tan rápidamente. La observó fijamente y su semblante volvió a estar serio, aunque siempre sereno.
- Aún no me has respondido una pregunta -murmuró.
- Adam Blade
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Re: Sala de Estar
Lo escucho, el universo... El universo no habia hecho nada por ella salvo, quizá permitirles encontrarse. Lo miro sonriente.
¿Cruel? No... En todo este tiempo he aprendido algo, no puedo atarte a mi. Comenzó. Aunque sinceramente me gustaría. Concluyo guiñándole un ojo. Sonrió, claro que no iba a librarse del tema así como así.
Casi lo consigo, ¿verdad? Dijo poniendo carita de inocente. El vinculo lo hice con.. tu.. madre. Dijo mostrandole la marca que tenia en la mano. Jure que os protegería hasta que todo esto acabe. Dijo encogiéndose de hombros. Tras estas palabras comenzó a sentir una extraña picazón en la palma de la mano abrió los ojos sorprendida, Christian debía de estar protegiéndola, que narices... Adam, vuelvo en diez minutos. Musito y le dio un beso fugaz antes de desaparecer de allí.
____________________________________________________________________________________________
Volvió al cabo de diez minutos, como había prometido, entro en la casa y paso por delante del espejo del recibidor sin darse cuenta que en la mejilla tenia una salpicadura de sangre, se acerco a Adam con una mirada de disculpa. Perdóname, había problemas. Musito dándole un beso en la mejilla con una sonrisa.
¿Cruel? No... En todo este tiempo he aprendido algo, no puedo atarte a mi. Comenzó. Aunque sinceramente me gustaría. Concluyo guiñándole un ojo. Sonrió, claro que no iba a librarse del tema así como así.
Casi lo consigo, ¿verdad? Dijo poniendo carita de inocente. El vinculo lo hice con.. tu.. madre. Dijo mostrandole la marca que tenia en la mano. Jure que os protegería hasta que todo esto acabe. Dijo encogiéndose de hombros. Tras estas palabras comenzó a sentir una extraña picazón en la palma de la mano abrió los ojos sorprendida, Christian debía de estar protegiéndola, que narices... Adam, vuelvo en diez minutos. Musito y le dio un beso fugaz antes de desaparecer de allí.
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Volvió al cabo de diez minutos, como había prometido, entro en la casa y paso por delante del espejo del recibidor sin darse cuenta que en la mejilla tenia una salpicadura de sangre, se acerco a Adam con una mirada de disculpa. Perdóname, había problemas. Musito dándole un beso en la mejilla con una sonrisa.
Última edición por Katrina Darent el Sáb Dic 15, 2012 1:05 am, editado 1 vez
- Katrina Darent
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Re: Sala de Estar
Adam ladeó el rostro, sonriendo pícaramente ante aquellas palabras.
- ¿Te gustaría atarme a ti? Bien, a mí también me gustaría ser el rehén de una bella señorita -comentó, pensativo, con una mano en el mentón, como si se estuviese imaginando la escena. Luego, soltó una pequeña y discreta risa. Pero, como suele suceder, aquel gesto algo risueño duró menos de lo que canta un gallo. El semblante de Adam se ensombreció.
- ¿Qué estás diciendo? ¿Cómo que con... mi madre? -murmuró, completamente atónito. ¿Ella estaba en verdad loca? ¿Se le había escabullido la razón por las orejas o qué?
- Katrina... -murmuró, a punto de continuar hablando, pero ella le plantó un beso en la mejilla y se marchó-. Pero qué...
Caminó de un lado a otro, pero no tuvo que esforzarse demasiado en deslizarse, pues ella llegó más rápido de lo que se fue. Sentía aroma a sangre en el aire; sangre humana. Adam se puso tenso y la observó. Su mente comenzó a buscar mentes cercanas para poder hacerse de información.
- ¿Qué demonios ha pasado? ¿Cómo vas a irte así, sola, sin decirme nada siquiera? ¿Estás, acaso, más loca de lo que pensé cuando me dijiste lo del vínculo con Angelique?
Estaba cabreado, preocupado. ¿Acaso ella pretendía arriesgarse siempre sola, de ese modo tan estúpido? Por más poderosa que fuera, en más de una ocasión estuvo a punto de morir.
- ¿Te gustaría atarme a ti? Bien, a mí también me gustaría ser el rehén de una bella señorita -comentó, pensativo, con una mano en el mentón, como si se estuviese imaginando la escena. Luego, soltó una pequeña y discreta risa. Pero, como suele suceder, aquel gesto algo risueño duró menos de lo que canta un gallo. El semblante de Adam se ensombreció.
- ¿Qué estás diciendo? ¿Cómo que con... mi madre? -murmuró, completamente atónito. ¿Ella estaba en verdad loca? ¿Se le había escabullido la razón por las orejas o qué?
- Katrina... -murmuró, a punto de continuar hablando, pero ella le plantó un beso en la mejilla y se marchó-. Pero qué...
Caminó de un lado a otro, pero no tuvo que esforzarse demasiado en deslizarse, pues ella llegó más rápido de lo que se fue. Sentía aroma a sangre en el aire; sangre humana. Adam se puso tenso y la observó. Su mente comenzó a buscar mentes cercanas para poder hacerse de información.
- ¿Qué demonios ha pasado? ¿Cómo vas a irte así, sola, sin decirme nada siquiera? ¿Estás, acaso, más loca de lo que pensé cuando me dijiste lo del vínculo con Angelique?
Estaba cabreado, preocupado. ¿Acaso ella pretendía arriesgarse siempre sola, de ese modo tan estúpido? Por más poderosa que fuera, en más de una ocasión estuvo a punto de morir.
- Adam Blade
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Re: Sala de Estar
Observo a Adam un instante, el tenia razón, no podía irme así como así, pero era necesario. La marca había dejado de arderle por lo que ya estaba tranquila. Era Fraiah, estaba en problemas. Murmuro mirando al suelo. El estaba preocupado por ella, era normal, no seria la primera vez que le daba un susto. Perdóname. Miro a Adam cuando menciono lo de Angelique. Eso lo hice para demostrarla que podría manteneros a salvo, pese a lo que ella pensara. Dijo mirándolo.
Se acerco a el y lo abrazo. Perdóname, no volveré a hacerlo. Musito, no, no iba a darle esos sustos nunca mas, el no se lo merecia.
Se acerco a el y lo abrazo. Perdóname, no volveré a hacerlo. Musito, no, no iba a darle esos sustos nunca mas, el no se lo merecia.
Última edición por Katrina Darent el Sáb Dic 15, 2012 1:05 am, editado 1 vez
- Katrina Darent
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Re: Sala de Estar
Frunció el ceño y miró hacia otro lado.
- ¿Cuándo vas a parar con todo esto? -murmuró-. Rompe ese maldito vínculo y ya, no necesitas protegernos -dijo luego, mirándola de reojo. Estaba algo cansado de que se arriesgara tanto. ¿Qué necesidad de hacerlo? Aquella mujer no había vuelto a molestar, quizás ya estaba bien muerta como debía estarlo desde un principio. Era hora de dejar todo aquello atrás. Había muchos nuevos problemas, y Adam no pretendía perder a Katrina por sus propios impulsos protectores de querer abarcarlo todo.
Ella le pidió perdón, pero él se sentía realmente mal. Estaba preocupado, nervioso, exaltado. Giró su cuerpo en cuanto le abrazó. Mordió su labio inferior, como si quisiese encontrar las palabras adecuadas para hablarle en esta tensa situación.
- ¿Qué fue lo que pasó ahí afuera? ¿No era que Nokku y Christian se encargarían de ella? ¿Por qué tenías que ir a arriesgarte, cuando no es tu responsabilidad? Lo que el cazador hizo con ella, es algo totalmente fuera de las leyes de los vampiros. Lo único que podrías hacer con ella sería darle una muerte limpia, y que deje de ser una cosa indefinible -espetó con furia, mirándose al espejo que se encontraba al otro lado de la sala, mientras ella lo abrazaba-. No deberías seguir preocupándote por alguien así. Sólo trae problemas -aclaró, finalmente.
- ¿Cuándo vas a parar con todo esto? -murmuró-. Rompe ese maldito vínculo y ya, no necesitas protegernos -dijo luego, mirándola de reojo. Estaba algo cansado de que se arriesgara tanto. ¿Qué necesidad de hacerlo? Aquella mujer no había vuelto a molestar, quizás ya estaba bien muerta como debía estarlo desde un principio. Era hora de dejar todo aquello atrás. Había muchos nuevos problemas, y Adam no pretendía perder a Katrina por sus propios impulsos protectores de querer abarcarlo todo.
Ella le pidió perdón, pero él se sentía realmente mal. Estaba preocupado, nervioso, exaltado. Giró su cuerpo en cuanto le abrazó. Mordió su labio inferior, como si quisiese encontrar las palabras adecuadas para hablarle en esta tensa situación.
- ¿Qué fue lo que pasó ahí afuera? ¿No era que Nokku y Christian se encargarían de ella? ¿Por qué tenías que ir a arriesgarte, cuando no es tu responsabilidad? Lo que el cazador hizo con ella, es algo totalmente fuera de las leyes de los vampiros. Lo único que podrías hacer con ella sería darle una muerte limpia, y que deje de ser una cosa indefinible -espetó con furia, mirándose al espejo que se encontraba al otro lado de la sala, mientras ella lo abrazaba-. No deberías seguir preocupándote por alguien así. Sólo trae problemas -aclaró, finalmente.
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Re: Sala de Estar
Se separo de Adam al escucharle esas palabras. Negó con la cabeza. Adam... No puedo, ¿No lo entiendes? Es un vinculo hecho con sangre, no puede romperse, hasta que... todo esto acabe. Musito mirándolo con tristeza, ¿Por que no lo entendía? Ella solo quería salvarle, salvar a todos aquellos que merecían vivir, aunque ella no era nadie para judgar tal cosa.
Escucho las duras palabras que dijo. E intento parecer neutral aunque de lo único que tenia ganas era de gritarle que no dijera esas cosas. Le tapo la boca con el dedo y lo miro con sus brillantes ojos verdes. Los mismos problemas que te he traído yo a ti. Musito. ¿Vas a matarme por ello? Le pregunto. Fraiah es la única que tras haberla hecho la vida imposible no intenta matarme cada vez que me ve Adam. No puedes pedirme que la deje morir y mucho menos que la mate. Musito. Pero... Te prometo que no me arriesgare mas por estupideces, ¿Si? Concluyo bajando la mano para dejarle hablar.
Escucho las duras palabras que dijo. E intento parecer neutral aunque de lo único que tenia ganas era de gritarle que no dijera esas cosas. Le tapo la boca con el dedo y lo miro con sus brillantes ojos verdes. Los mismos problemas que te he traído yo a ti. Musito. ¿Vas a matarme por ello? Le pregunto. Fraiah es la única que tras haberla hecho la vida imposible no intenta matarme cada vez que me ve Adam. No puedes pedirme que la deje morir y mucho menos que la mate. Musito. Pero... Te prometo que no me arriesgare mas por estupideces, ¿Si? Concluyo bajando la mano para dejarle hablar.
- Katrina Darent
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Re: Sala de Estar
La observó fijamente, con un brillo carmesí en sus ojos. Estaba sediento, pues toda esta situación acababa por volverlo loco y violento con sus instintos. Sólo quería destruir a todo aquel que complicara su vida, la de Katrina, y acabar con todo esto de una vez por todas.
Pero era estúpido que pensase eso. Era totalmente hipócrita de su parte querer desterrar los problemas que, en una gran parte, él había sembrado. Comenzando por Fraiah. Si él no se hubiera obsesionado con su sangre en el pasado, nada de esto estaría ocurriendo.
Quiso apartar la vista de los verdes ojos de Katrina, pero no pudo. Quiso pedirle perdón por decir tantas cosas, pero tampoco pudo. Su orgullo le repiqueteaba justo allí, en su garganta, sitio en el cual se desataba su sed de muerte y destrucción, como otras tantas veces.
- Ya he escuchado eso muchas veces -susurró, aferrándose a sus últimas palabras-. Quisiera que alguna vez fuese real -agregó, dejando entrever en su mirada cierto brillo melancólico.
Pero era estúpido que pensase eso. Era totalmente hipócrita de su parte querer desterrar los problemas que, en una gran parte, él había sembrado. Comenzando por Fraiah. Si él no se hubiera obsesionado con su sangre en el pasado, nada de esto estaría ocurriendo.
Quiso apartar la vista de los verdes ojos de Katrina, pero no pudo. Quiso pedirle perdón por decir tantas cosas, pero tampoco pudo. Su orgullo le repiqueteaba justo allí, en su garganta, sitio en el cual se desataba su sed de muerte y destrucción, como otras tantas veces.
- Ya he escuchado eso muchas veces -susurró, aferrándose a sus últimas palabras-. Quisiera que alguna vez fuese real -agregó, dejando entrever en su mirada cierto brillo melancólico.
- Adam Blade
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Re: Sala de Estar
Miro a Adam durante unos instantes que parecieron años, no le gustaba que el se enfadara y mucho menos con ella, pero tenia que entenderlo. Ella debía protegerlos, era su trabajo, su cargo como presidenta del consejo lo exigía aunque también estaba cansada de toda la situación, como el, deseaba dejarlo, simplemente ser feliz junto a el, pero, si los abandonaba a su suerte no podría ser feliz jamas.
Escucho las palabras que pronuncio y sonrió dulcemente, a pesar de todo el lo único que hacia era preocuparse por ella. Adam, nunca, nada me separará de ti. Musito acariciándole el rostro. Jamas, volvería del infierno si es que consiguieran mandarme allí algún día por estar junto a ti. Concluyo y entonces lo beso suavemente, casi no habían podido pasar un rato juntos, a solas desde que habían vuelto a verse y ella lo echaba muchísimo de menos. No discutamos mas, por favor. Suplicó.
Escucho las palabras que pronuncio y sonrió dulcemente, a pesar de todo el lo único que hacia era preocuparse por ella. Adam, nunca, nada me separará de ti. Musito acariciándole el rostro. Jamas, volvería del infierno si es que consiguieran mandarme allí algún día por estar junto a ti. Concluyo y entonces lo beso suavemente, casi no habían podido pasar un rato juntos, a solas desde que habían vuelto a verse y ella lo echaba muchísimo de menos. No discutamos mas, por favor. Suplicó.
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Re: Sala de Estar
Suspiró. No podía contra ella, contra su mirada y contra sus palabras; mucho menos podría contra sus labios y su dulce forma de besar. A veces maldecía que ella tuviera aquel poder sobre él. A veces, simplemente quisiera arrancarse el corazón y no ser capaz de amarla. Pero, ¿en qué mente retorcida entraría aquel razonamiento? Por más que Adam tuviera una lo bastante demente, no podría imaginar jamás un mundo sin aquella joven sanguinaria que le robó el aliento en una fiesta de la Academia, hace ya alrededor de dos años. Por esta razón, cedió ante su tacto y se dejó llevar por sus labios. Cerró los ojos un instante, pero volvió a abrirlos cundo escuchó su suplica. Acarició con suavidad su cabello, y escondió un mechón detrás de su oreja. Asintió con suavidad. Ella tenía razón. Debían ya dejar esta discusión para otro momento. ¿Cuánto hacía que no disfrutaban de un grato momento a solas?
- Te he echado mucho de menos -susurró, al fin, derritiendo todo aquel hielo que se había formado a su alrededor.
- Te he echado mucho de menos -susurró, al fin, derritiendo todo aquel hielo que se había formado a su alrededor.
- Adam Blade
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